Por fin ha llegado el esperado momento de dar el paso para comprar una vivienda. Ya tienes decidido el lugar y la zona en la cual quieres vivir. Es más, sabes dónde van a construir un nuevo bloque de edificios y estás planteándote la opción de comprar una vivienda sobre plano para que te resulte más barato, pero que puedas estrenar y personalizar a tu gusto.
Si este es el caso, este artículo te interesa ya que te ofrecemos un decálogo con los mejores consejos para que puedas comprar con éxito la mejor vivienda sobre plano sin haberla visto acabada. ¡Comenzamos!
Los 10 mandamientos para comprar una vivienda sobre plano con éxito
Lo primero que debes tener en cuenta es que, al comprar una vivienda sobre plano, no tienes la posibilidad de verla acabada. No obstante, las tecnologías han mejorado tanto hoy en día que mediante simulación 3D puedes hacerte una idea bastante aproximada de lo que será. Además, siempre que compramos una vivienda sobre plano, el precio tiende a ser bastante más reducido que si lo hacemos una vez esté acabada —y ello, influye bastante en nuestra elección, ya que actualmente resulta bastante más complejo optar a otras viviendas más caras—.
No obstante, debemos tener en cuenta algunos aspectos importantes, antes de nada, que explicamos a través del siguiente decálogo:
- Lo primero. Fíjate en cuáles serán las vistas. Asegúrate que tu vivienda esté enfocada hacia la dirección que quieres para que la luz del sol pueda entrar a través de sus ventanas y que no haya ningún objeto intermedio que pueda ocasionar una pérdida de luminosidad, o que provoque un impacto visual negativo. En algunos casos, estas especificaciones no aparecen reflejadas sobre el plano, ya que se limitan exclusivamente al aspecto del espacio privado y de las zonas comunes.
- Asegúrate de que ninguna constructora vaya a edificar un piso delante de tu vivienda. Mira también que no vayan a modificar la zona ni que esté contemplada una actuación de grandes características que pueda afectar considerablemente a las vistas de tu nuevo hogar o que, incluso, nos resulte molesto. Un ejemplo puede ser la construcción de un metro, una autovía, un centro comercial, etc. Pregunta a la constructora pero, también, al ayuntamiento de tu municipio. Trata de averiguar si el suelo de los alrededores es público o privado y si es edificable.
- Infórmate sobre la solvencia de la promotora. Obtén toda la información posible para averiguar que la promotora no tenga problemas económicos y que garanticen el acabado de la construcción. Debes consultar datos como la trayectoria de la empresa, la solvencia, la situación económica, etc. Un ejemplo de empresas que trabajan con pisos sobre plano y de gran calidad es Fipresa. Puedes conocer toda la información sobre ella en la página web: https://fipresa.com/chalets-obra-nueva-puerta-de-hierro-madrid/.
- Mira, también, que todos los papeles estén en regla. Asegúrate que la empresa ha permisos necesarios para poder llevar a cabo la edificación de la vivienda.
- Comprueba que el suelo sobre el cual vaya a realizarse la construcción de la vivienda sea edificable y no cuente con ninguna característica especial que luego pueda ocasionarte problemas.
- Revisa el contrato. Antes de nada, lee el contrato detenidamente, sobre todo las letras pequeñas en la cuales se especifica que el cliente ha sido informado de todos los aspectos necesarios. En estos apartados en donde solemos llevarnos la sorpresa por no haberlos revisado con detenimiento.
- Incluye un contrato de penalización. Los Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API’s) recomiendan que en el contrato aparezca reflejado la posibilidad de penalizar a la empresa en caso de que no cumplan con los plazos de entrega de las propiedades.
- Fíjate en la fecha de los importes y pagos. Mira detenidamente cuándo tienes que pagar y cuánto. Su incumplimiento puede derivar serios problemas para el cliente, así que asegúrate de que puedas cumplir con los plazos, antes de nada.
- Propón modificaciones. Como tu vivienda no ha sido construida todavía, es posible que puedas realizar alguna modificación, como unir habitaciones o ampliar el salón o cocina.
- Disfruta de tu nueva vivienda. Por supuesto, aprovecha para disfrutar de tu nueva vivienda que con tanto esfuerzo has conseguido y decórala a tu gusto. ¡Es hora de vivir en tu propio hogar!