Una de las características que definen a los todoterrenos y a los automóviles SUV es su transmisión 4×4 que hace posible que estas máquinas puedan ser conducidas por cualquier terreno, ya bien sea de asfalto, de tierra o incluso por montaña sin ningún tipo de problema. En esta guía te vamos a contar cómo funciona la transmisión 4×4 de todoterrenos y SUV para que comprendas el gran potencial de estos vehículos.
¿Qué tipos de transmisión 4×4 existen?
Antes de hablar de su funcionamiento, queremos aclarar que la transmisión 4×4 de los todoterrenos y SUV pueden ser de diferentes tipos, siendo una de las más habituales la conectable manual. En este tipo es el propio conductor el que va a elegir la marcha que desea, consiguiendo de esta forma adaptar la potencia del motor al terreno en el que se encuentra y ser el que vaya a elegir si se necesita sacar todo el rendimiento del motor, por ejemplo cuando se desea salir de un bache o de una zona complicada o empinada, como moverse con menos potencia, ideal cuando estás bajando una colina o la ruta no es complicada de seguir a una marcha lenta.
Otro de los sistemas de transmisión 4×4 más solicitados son los automáticos o también denominados semipermanentes, en los que el conductor pasa a un segundo plano en esta elección y es el propio vehículo gracias a su apartado electrónico el que decide si usar únicamente las dos ruedas motrices para la conducción o si el terreno es lo suficientemente complicado pasar de las dos a las cuatro en un momento. Esto es interesante en casos en los que las ruedas motrices están deslizándose o no tienen una adherencia perfecta, por lo que se da uso a la transmisión 4×4 tan requerida incluso en el renting todoterrenos, puesto que hace que sea más sencilla su conducción y disfrute.
Funcionalidad de la transmisión 4×4
Una de las funcionalidades con las que cuentan es que se puede repartir de manera efectiva la propia potencia del motor de un eje de transmisión a cada una de las ruedas, de esta manera se crean como dos semiejes que consiguen trabajar de la manera deseada para mover el vehículo en circunstancias más complicadas y que se necesite elegir donde debe ir la potencia.
Por otro lado, gracias a la transmisión en los terrenos y a su funcionamiento independiente, se consigue que las ruedas giren de manera correcta en cualquier circunstancia, incluso cuando estamos tomando una curva, consiguiendo de esta manera evitar los derrapes incluso cuando el suelo está mojado. Si sabes que en tu camino te vas a encontrar con zonas húmedas o con pequeñas capas de hielo, además de tener curvas, es preferible que utilices uno de estos vehículos para mejorar el agarre a la carretera o al terreno, consiguiendo que la potencia del motor se reparta de manera inteligente, consiguiendo que la conducción sea más liviana.
Cabe destacar que dentro del funcionamiento de la transmisión 4×4 existen otros tipos de diferencial que debes conocer y que te ayudarán en cada momento, aunque algunos son más recomendables que otros. Lo primero que hay que decir que los convencionales, que son aquellos modelos más antiguos o que cuentan con el aspecto de un todoterreno o SUV pero que realmente no lo son, contarán con un diferencial convencional que no será capaz de generar tracción a aquella rueda que se encuentra opuesta a la que patina en una curva, sin embargo, existen modelos de transmisión que consiguen bloquear este diferencial para que el agarre y la tracción sean perfectos en todos los sentidos. Muchos expertos nos han comentado que el más recomendable de todos es el de acoplamiento de discos, puesto que es automático y en el caso de que el coche requiera un diferencial u otro, el propio vehículo lo activará según las condiciones del terreno, la velocidad y la conducción del piloto.